Etiqueta: Iván Redondo

Nadia

Paula Nevado

Nadia Calviño (los del PP en el Congreso de los Diputados la llaman Nada, qué simples), la tecnócrata gallega que llegó al gobierno bonito de Pedro Sánchez para sorpresa de la mayoría, pasados los tres años, piano piano y a base de tesón, agenda y acierto, se encarama en la Seguir leyendo

Una remodelación de Gobierno de verdad

Paula Nevado

Nuestros presidentes en democracia han sido, en general, rácanos y medrosos a la hora de remodelar sus Ejecutivos. Casi nunca fueron al fondo de los problemas que ellos mismos conocían y sufrían por los motivos más variados. “Es muy duro despedir a alguien con el que has colaborado codo con Seguir leyendo

Algunas cosas mejoran pero…

Paula Nevado

Algunas cosas van mejorando pero no nos llegan bien contadas o, cuando el relato viene de una voz que atina, de inmediato aparecen grandes oleadas de confusión que lo emborronan. Detengámonos en algunos asuntos relevantes del momento: Al fin tenemos Presupuestos Generales del Estado (PGE), la aspiración natural y clave Seguir leyendo

La importancia del jefe de prensa

Paula Nevado

Pedro Sánchez continúa asombrando con la formación de su gobierno. Sus lecturas son múltiples y la mayoría, positivas. Los medios de comunicación y analistas políticos (también la opinión pública) las vienen resaltando los últimos días: la amplia mayoría de mujeres en el Consejo, que continúa haciendo crecer la marea, ojalá Seguir leyendo

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Acerca de este blog

Este blog nace de la necesidad de contar algo, por insignificante que sea, sobre todo aquello que me interesa o inquieta y que casi siempre tendrá relación con la comunicación humana en su sentido más amplio.

La política, la economía, las artes, los placeres de la vida, como la gastronomía, el cine o la literatura tienen aquí cabida. El mundo actual en crisis se ha convertido en una noria de opiniones libérrimas, con frecuencia desencajadas, que se afanan en la crítica feroz más que en tejer futuro.

Los líderes sociales de aquí y allá, lo admitan o no, se han quedado sin respuestas. Continúan sus tareas con torpeza ayudados por viejas recetas que abandonan de inmediato porque ninguna le sirve.

En esta especie de equivocación colectiva en la que estamos embarcados, este bloguero sólo pretende vivaquear en nuestro azaroso caminar a tientas con la pretensión de encontrar en alguna ocasión esa pepita de luz que nos recuerde que la esperanza es la emoción humana más necesaria de recuperar en este tiempo.