La verdad es que salí del hotel aliviado. Demasiado tiempo dentro y bastantes acontecimientos ocurridos para ser un lugar civilizado. Todo empezó a mediodía. Nada más entrar en la habitación oímos un clic apagado pero insistente. “¿Qué será?” En la habitación no había más almas que las nuestras. Hasta miré Seguir leyendo
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