
Hace unas semanas, sentado junto a unos amigos en la barra-bar antesala del restaurante madrileño El Columpio (veganismo y huevos rotos con foie en un gran espacio adornado con objetos simpáticos) en el Chamberí palaciego más exclusivo, me llamó la atención cómo los jóvenes clientes, ellas y ellos, salían rojizos y felices Seguir leyendo