[youtube]https://www.youtube.com/watch?t=12&v=XpGHL47_S2s[/youtube]
El vuelo del pájaro siempre ha impresionado al hombre: es una de las asignaturas que nunca aprobará. El vuelo para nosotros es, sobre todo, libertad y dominio (poder) y más tarde – mucho más tarde – empezamos a apreciarlo como algo bello y un juego. En este video de impresión observamos a decenas de miles de estorninos dibujando geometrías en el aire. Los ornitólogos llaman a estos paseos colectivos por las alturas parvadas o enjambres y son las formaciones animales más perfectas de la naturaleza, surgidas con el único fin de alimentarse y protegerse de sus predadores. Pero el hombre moderno se queda con su extraordinaria belleza sin preocuparle ni poco ni mucho entender algo de lo que ve. Sólo se maravilla y sorprende. Los científicos hace tiempo que hicieron de estas cortinas de los cielos complejas ecuaciones matemáticas que descifran sus porqués y luego las archivaron en las bibliotecas de los conocimientos secretos. Pero a la caída de la luz, en las tibias tardes de holganza, observan como cualquiera los cielos cuando estos se inundan de murmuraciones y hacen esta pregunta retórica a sus hijos: “¿No es imposible lo que vemos?”