La distancia entre mi mano y tu corteza
la mide tu corazón y mi temblor.
¡Qué rugoso y enorme eres!
¡Cómo hablas al mundo!.
La distancia entre mi mano y tu corteza
la mide tu corazón y mi temblor.
¡Qué rugoso y enorme eres!
¡Cómo hablas al mundo!.